Mostrando entradas con la etiqueta V Simposio Internacional Lactancia Materna. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta V Simposio Internacional Lactancia Materna. Mostrar todas las entradas

miércoles, 23 de octubre de 2013

La lactancia materna es un derecho humano

Tomar el pecho en público no es un delito.
Seguimos repasando las ponencias pendientes del V Simposium Internacional de Lactancia Materna, celebrado por La Liga de la Leche de Euskadi. En este caso la intervención sobre Elisabeth Sterken titulada "La lactancia materna es un Derecho Humano".

El concepto de la lactancia como un Derecho Humano está amparado por varios documentos y acuerdos internacionales. Por ejemplo, en la Convención de los Derechos del Niño se reconoce el  derecho del niño al disfrute del más alto nivel posible de salud. Por otro lado, la Declaración de Innocenti de 1990 establece que "debe permitirse a todas las mujeres practicar lactancia materna exclusiva y todos los niñosdeben ser alimentados exclusivamente con leche materna desde su nacimiento hasta los 4-6 meses de edad", recomendando a los estados que promuevan leyes que protejan el derecho a amamantar de las mujeres trabajadoras, estableciendo, asimismo, los medios para su cumplimiento.

Desde esta perspectiva, las madres y los bebés, subrayó Sterken, forman una unidad social y biológica inseparable. "Los bebés y niños tienen derecho a ser amamantados y las madres tienen derecho a amamantar". La lactancia materna es la norma biológica, es común a todas las madres y bebés, y supone un acceso continua a comida suficiente, segura y nutritiva.

Violaciones del derecho
Una vez establecido que la lactancia materna es un derecho para madres y bebés, es necesario también un marco jurídico que reconozca este derecho y establezca las penalizaciones oportunas a todos aquellos que impidan a las madres y bebés ejercerlo. Pero ¿Cómo se viola el derecho a amamantar? "Quienes realizan afirmaciones sobre la lactancia materna que socavan la confianza de la mujer en la lactancia, no deben ser considerados como inteligentes empresarios haciendo su trabajo, sino como transgresores de los derehos humanos del peor tipo", afirmó Sterken, citando al autor original de este frase: Stephen Lewis, antiguo subdirector de UNICEF.

Promocionar y vender leches de fórmula negando los beneficios de la leche materna o poniendo en duda la capacidad de las mujeres de amamantar es una violación de los derechos humanos y pone en riesgo la salud de cientos de niños de todo el mundo. Las consecuencias de este tipo de prácticas no son solo millones de muertes evitables cada año, sino miles de casos de desnutrición, pero también el aumento de enfermedades y el mayor riesgo de obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y cánceres, coeficiente intelectual más bajo, así como anomalías neurológicas y de compartamiento.

Pero no solo se viola el derecho a la lactancia materna negando los beneficios de la leche de fórmula o usando las tan manidas frases "si no tienes suficiente leche" o "si no puedes amamantar". Otras prácticas que ponen en riesgo el derecho de madres y bebés a la lactancia materna son la sexualización del pecho,la falta de prioridades políticas y gubernamentales, la medicalización de la lactancia, las actitudes sociales negativas y la falta de información, sin olvidar la desinformación.

Como ejemplos de defensa de la lactancia desde la perspectiva de los derechos humanos, Sterken mencionó el grupo de Facebook Respect the breast, un grupo en canada que sigue posteando imagenes delactancia en esta red social, ya que se amparan en la lactancia materna como un derecho humano. En la misma línea está la campaña "Breastfeeding in public is not a crime" (La lactancia en público no es delito), a la que pertenece la foto que ilustra este post y que fue lanzada por la comisión de derechos humanos de Canadá. Desde este perspectiva, concluyó Sterken, invitar a una madre a amamantar en una sala de lactancia es una violación de los derechos humanos

martes, 22 de octubre de 2013

Amamantar tras un cáncer de mama

La semana pasada se celebró el día mundial del cáncer de mama. Una celebración más entre las del último mes, que parece que octubre está dedicado a la maternidad y la salud. Tenía  un post pendiente de publicar desde el V Symposium Internacional de la Liga de la Leche de Euskadi sobre el tema del cáncer de mama y qué mejor momento que este. Entre las intervenciones de Fedro Peccatori y Giulia Belletini me quedaba por resumir su intervención sobre el amamantamiento después de un cáncer de mama.

Empezó Peccatori señalando que el cáncer de mama es uno de los de mayor incidencia entre las mujeres en edad fértil (de 15 a 39 años) y, además, se está detectando un aumento de la incidencia entre mujeres jóvenes. "La buena noticia es que el cáncer es una enfermedad que se puede curar" insisitó Peccatori, señalando que el aumento de la supervivencia de las mujeres afectadas es lo que ha permitido estudiar la influencia de posteriores embarazos y lactancias en la evolución de la enfermedad.

"Paradójicamente, las mujeres que han pasado por un cáncer de mama suelen tener menos hijos, aunque sea su deseo tenerlos" explicó el italiano, señalando que esta menor tasa de natalidad podría deberse al descenso en la fertilidad de estas mujeres posterior a los tratamientos, por problemas en el matrimonio derivados de una enfermedad larga y complicada o por miedo a que el embarazo pueda ser peligroso.

Según Peccatori todavía existe mucha controversia entre los profesionales sobre si es realmente peligroso o no quedarse embarazada después de un cáncer de mama. En una encuesta entre oncólogos italianos, el 52% opinó que sí era peligroso, mientras que el 48% se expresó al contario. En realidad, subrayó el ponente, no hay estudios que fundamenten la opinión de que los embarazos sean más peligrosos. Normalmente, los oncólogos que recomiendan a las mujeres no quedarse embarazadas lo hacen pensando que, durante la gestación, aumenta el nivel de estrógenos y el cáncer de mama suele aumentar cuando se registran altos niveles de estrógenos durante periodos prolongados. Aún así, señaló Peccatori, esto es una consideración teórica no basada en ninguna evidencia científica.

El estudio Safety of pregnancy following breast cancer diagnosis: A meta-analysis of 14 studies (Seguridad del embarazo después de un diganóstico de cáncer de mama: un meta-análisis de 14 estudios), confirmó que el embarazo en las mujeres que han sufrido un cáncer de mama es seguro y no compromete su supervivencia, por lo que no se debería negar a estas mujeres la posibilidad de quedarse embarazadas tras superar la enfermedad.

Lactancia tras un cáncer de mama
Tras un cáncer de mama, en el que el pecho afectado ha sido intervenido o radiado, se suelen observar diferentes respuestas al estímulo hormonal del embarazo entre la mama sana y la afectada por el cáncer. No solo hay diferencias en términos de volumen, sino también en la respuesta de la areola-pezon. Será importante tener en cuenta estas pecualiaridades a la hora de enfrentarse a la lactancia en ese pecho.

Peccatori señaló que LA LACTANCIA DESPUÉS DE UN CÁNCER DE MAMA ES SEGURA y dió varios argumento para apoyar su afirmación:
  1. La mayoría de las modificaciones de la gándula mamaria ocurren durante el embarazo, sin empeorar el pronóstico.
  2. La lactancia tiene un efecto protector sobre el desarrollo de los cánceres de mama.
  3. Los datos sobre la seguridad de la lactancia después de un cáncer de mama son escasos, pero todos los que hay son positivos y apuntan a que la lactancia es segura. 
  4. Los profesionales que deben hacer los controles, pueden hacerlos sin problemas durante la lactancia. Se pueden realizar mamografías, ecografías y todas las pruebas que sean necesarias para seguir con el diagnóstico y prevención del cáncer de mama.

En el estudio Breastfeeding in breast cancer survivors: Pattern, behaviour and effect on breast cancer outcome, Peccatori y sus colegas entrevistaron a 20 mujeres que se habían quedado embarazadas después de un tratamiento de cáncer de mama y no hubo diferencia en términos de reaparición del cáncer. "No tienen relevancia estadística, pero en el grupo de las lactantes el cáncer apareció en el pecho no usado para amamantar", explicó el italiano y añadió que es necesario realizar más estudios al respecto.

La lactancia es segura para el bebé
Finalmente, el ponente señaló que, aunque a muchas pacientes les preocupe la posibilidad de que las células cancerígenas pasen a la leche, en realidad no hay ninguna evidencia de que las células tumorales pasen a la leche. Asimismo, no hay toxicidad tampoco asociada a la quimio y/o hormonoterapia recibida y tampoco se producen alteraciones en las características de la leche.

Giulia Bellettini, por su parte, abordó en la ponencia el aspecto más práctico del amamantamiento después de un cáncer de mama y explicó que, después de una mastectomía, no hay ningún problema en amamantar con un solo pecho, porque la leche se produce a demanda. Además, los casos de gemelos, lactancia en tándem o lactancia unilateral voluntaria (en alguans culturas) demuestran que es posible amamantar a un bebé con un solo pecho.

Bellettini confirmó que, después de la cirguía conservadora y la posible radioterapia sobre la mama operada, se produce una fibrosis intersticial y se registra una falta de respuesta al estímulo hormonal durante el embarazo tanto en el tejido mamario como el el pezón y la areola. Normalmente, esto deriva en una producción nula o reducida en esa mama, pero, aún así, eso no supone una contraindicación para amamantar en el lado operado.

Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de amamantar tras un cáncer de mama es que la cirugía conservadora puede derivar en modificcciones anatómicas y funcionales de la areola y el pezón y una sección de los ductos, aunque es posible que, con el tiempo, la red de conductos se recanalice y vuelva a ser funcional. Otra posible complicación es la sección de los nervios del pezón, que puede derivar en una falta de estimulación en el sistema nervioso central.

Recomendaciones para amamantar después de un cáncer de mama
Bellettini finalizó su intervención señalando que para que la lactancia tenga éxito se debe empezar cuanto antes con control y asesoramiento por parte de profesionales informados que puedan ayudar y orientar a la madre.

Se debería optimizar el drenaje de la mama, recomendar el cambio de posiciones durante la lactancia, realizar tomas frecuentes y valorar el crecimiento y el bienestar del bebé. Si la producción es deficiente, se debe valorar individualmente la necesidad de introducir suplementos de leche de fórmula.

Estas madres necesitan apoyo personalizado y regular, sobre todo en el periodo de calibración de la lactancia, pero sin exagerar o tratarlas como enfermas. Para las mujeres que han superado un cáncer de mama, el embarazo y la lactancia suponen la posibilidad de centrarse en la salud y en la normalidad, olvidar el discurso de la enfermedad y empezar a hablar en términos de maternidad, normalidad y salud.

Más sobre cáncer de mama y lactancia en:
El carcinoma de mama durante la lactancia, pronóstico y tratamiento   
Efecto preventivo de la lactancia en el cáncer de mama premenopaúsico  
Diagnóstico radiológico de nodulo mamario durante la lactancia  
Nódulo mamario durante la lactancia: cómo afrontar el problema y cómo gestionar la lactancia

viernes, 19 de octubre de 2012

El carcinoma de mama durante la lactancia, pronóstico y tratamiento

Fedro Peccatori, Oncólogo del Instituto Europeo de Oncología fue el tercer pilar en el que se apoyó el debate sobre lactancia materna y cáncer de mama en el V Simposium de Lactancia Materna de La Liga de la Leche de Euskadi.

El cáncer de mama durante la gestación, comenzó Peccatori, se define como neoplasia de mama que se encuentra durante el embarazo, la latancia o en el primer año tras el parto. En el mundo occidental, el cáncer de mama es cáncer más frecuente del embarazo.

En los últimos años está aumentando el cańcer de mama durante el embarazo y la lactancia, debido al aumento en la edad de las madres gestantes, ya que la edad es uno de los principales factores de riesgo para el cancer de mama. Aunque Peccatori señaló que también está aumentando la incidencia de cáncer de mama entre mujeres jóvenes y no se sabe muy bien la razón. Después de esta introducción, pasó a hacer un análisis de los distintos mitos médicos que suponen una barrera para el diagnóstico precoz del cáncer de mama durante el embarazo y la lactancia:
  • Es demasiado jóven para un tumor, será un coagulo de leche. Esto es lo que piensa (e incluso dice) un médico sobre un tumor en la lactancia sin basarse en ninguna evidencia real al respecto.
  • Esperamos que regrese el ciclo menstrual y después veremo.
  • No se pueden hacer exámenes a la mama durante la lactancia porque las radiaciones a la mama le hacen daño al niño. 
El retraso en el diagnóstico es un problema, ya que a la madre lactante se le suele diagnosticar el cáncer en estadios avanzados. La mayoría de los tumores tenían más de 2 cm y nódulos linfáticos positivos al ser diagnosticados. Como sucede con las mujeres jóvenes en general el cancer de mama durante la lactancia está asociado a una mayor agresividad de la patología. El pronóstico del cáncer de mama diagnosticado durante la lactancia es peor, con un riesgo relativo casi el doble en comparación con mujeres no gestantes/lactantes.

Un momento especialmente problemático es el de la involución de la mama tras el embarazo y la lactancia, ya que se ha visto que contribuye a la diseminación de la afección. 

Conclusiones
  • El cancer de mama durante la lactancia está asociado normalmente a un peor pronóstico debido a un retraso en el diagnóstico y agresividad del tumor.
  • La involución de la mama después del embarazo y la lactancia es un momento de riesgo.
  • Cirugia, radioterapia, quimioterapia y hormonoterapia no son compatibles con la lactancia.
  • Es necesaria una mayor inversión en investigación que contribuya a conocer y prevenir el cáncer de mama durante el embarazo y la lactancia.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Nódulo mamario durante la lactancia: cómo afrontar el problema y cómo gestionar la lactancia

Giulia Bellettini, Pediatra e IBCLC italiana, añadió su voz a la mesa redonda sobre lactancia materna y cáncer que se celebró en el V Simposium Internacional de Lactancia Materna organizado por La Liga de la Leche Euskadi. Belletini subrayó lo importante que es que cada mujer conozca su mama para poder ser así consciente de las alteraciones que pudieran ser peligrosas.

Durante la lactancia ambas mamas aumentan en volumen, densidad y nodularidad. Estas características se modifican cada día según el estado de turgencia de las mamas. Cuando un nódulo se puede palpar durante unos días y no cambia sus características, tiene que ser evaluado con atención y reevaluado en el tiempo.
En la lactancia la causa más frecuente de nodularidad es un vaciado inadecuado de la mama, lo que puede provocar una obstrucción de conductos o mastitis. Para prevenir este tipo de nódulos hay que promover las tomas frecuentes y con cambios de posición. También se puede realizar presión manual o masajes en dirección al pezón o aplicar calor en la zona afectada antes de la toma.

Cuando existe una componente inflamatoria importante se puede añadir un atiinflamatorio. Cuando la obstrucción deriva en mastitis, es necesario actuar con terapia antibiótica y propiciar el descanso de la madre, garantizando, a su vez, un correcto vaciado de la mama.

Si después de todos estos tratamientos el nódulo persiste y no hay mejoría, sería necesario realizar una evaluación ecográfica para discernir si es un nódulo sólido o quístico. Entre los quísticos, se podría tratar de un nódulo simple, galactocele o un absceso. Entre los sólidos: fibroadenoma, adenoma de la lactancia, hematoma, papiloma y carcinoma.

Desde el punto de vista clínico el galactocele es una dilatación del ducto mamario de aspecto quístico y lleno de leche. Es blando, elástico y móvil. Puede ser doloroso a la palpación y si es aspirado vuelve a rellenarse de leche. El contenido líquido con el tiempo puede volverse más denso por la reabsorción de la parte acuosa, con la posible dificultad en el diagnóstico ecográfico.. E n el galactocele es necesario un drenaje regular de la mama para evitar complicaciones, ya que puede evolucionar hacia un absceso mamario.

El absceso es una complicación de una mastitis debido a una falta de drenaje de la mama. Se presenta como una colección de pus en el interior del sistema alveolo-ductal sin contacto con el exterior. Desde el punto de vista clínico dos presentaciones:
  • Una muy evidente en su componente inflamatoria, abscesos más superficiales que se presentan como mamas fluctuante, se nota como se mueve el líquido. Tienden a formar fístula espontanea.
  • En el interior de la mama es menos sintomático y solo podemos sentir un nódulo profundo.
El tratamiento es en general quirúrgico, con aspiración o incisión, y terapia antibiótica hasta la resolución. Es mejor suspender la lactancia del lado afectado hasta la incisión, manteniendo un drenaje manual de la mama, aunque hay que valorar cada caso particular.

El adenoma de la lactancia es una masa no dolorosa, generalmente situada en los cuadrantes superiores externos.

Signos que deberían hacer sospechar de carcinoma:
  • Nódulo duro con márgenes irregulares.
  • Crecimiento más lento con respecto a otras situaciones.
  • Fijo con respecto al tejido circundante.
  • Retracción cutánea, retracción del pezón.
  • Adenopatías axilares.
  • Rechazo persistente a lactar de la mama afectada.
  • Secreción hemática
En casos de mastitis atípica
  • Si no desaparece,
  • tiende a regresar en la misma área,
  • hay difusa infiltración cutánea (piel de naranja), y del pezón con o sin nódulo subyacente,
  • existen adenopatías axilares duras y no dolorosas.
Son situaciones de alarma donde la madre y la doctora tienen que tener atención ya que pueden ser signos de mastitis carcinomatosa, una patología no muy frecuente y que puede confundirse con una mastitis.

Como consultores de lactancia estamos acostumbrados a tener una actitud de manos fuera, pero cuando una madre nos habla de la aparición de un nódulo es interesante que la consultora pueda ayudarla a descubrir dónde está el nódulo y que la evaluación se haga en varios momentos diferentes, resaltó Bellettini.

Conclusiones
  • La mayoría de los nódulos mamarios en la lactancia son de tipo benigno.
  • Es fundamental una adecuada gestión de la lactancia que permite prevenir, resolver los nódulos debidos al drenaje.
  • En caso de nódulos que persisten durante más de 72 horas, tres cuatro días y no cambian sus características clínicas, se debe enviar a la madre a hacer una ecografía.
  • La ecografía permite discriminar nódulos quísticos de sólidos. 
  • La necesidad de una biopsia con una aguja fina o de una biopsia microhistológica tiene que ser valorada en base a criterios clínicos y radiológicos

lunes, 15 de octubre de 2012

Diagnóstico radiológico de nodulo mamario durante la lactancia

Paula Merino impartió una ponencia titulada "Diganóstico radiológico del nódulo mamario durante la lactancia", un tema muy importante para aclarar dudas y falsos mitos a los que se enfrentan muchas mujeres a la hora de diagnosticar cualquier bulto o nódulo que aparece en el pecho durante la lactancia. Sobre todo, teniendo en cuenta que muchos profesionales todavía recomiendan destetar a la ligera o le señalan a la madre que mejor vuelva cuando deje de dar el pecho, en la absurda creencia de que las lactancias de hoy en día siguen durando apenas dos o tres meses.

Paula Merino, adjunta de la unidad radiológica de diagnóstico por la imagen del cáncer de mama del Hospital Marqués de Valdecilla (Santander), habló de los cambios fisiológicos que se producen en el pecho durante el embarazo y la lactancia. “Aunque no existe un protocolo de imagen estandarizado en cuanto al estudio del nódulo mamario durante el embarazo y la lactancia, ante una mujer que durante éste período presente a la exploración física un nódulo palpable la primera prueba de imagen a considerar es la realización de una ecografía”, señaló Merino . “Se trata de una prueba inocua (al no usar radiaciones ionizantes) y con alta rentabilidad diagnóstica (con una sensibilidad cercana al 100%) en este tipo de pacientes en las que la alta densidad mamaria disminuye la sensibilidad de la mamografía”, añadió. La ecografía será, por tanto, la prueba de elección para el diagnóstico, pero también como guía para cualquier otro tratamiento diagnóstico o terapéutico.

¿Se debe entonces realizar una mamografía?, se preguntó la ponente. La respuesta es afirmativa, siempre y cuando el especialista crea que va a proporcionar información adicional y, sobre todo, ante la sospecha de un cáncer de mama, ya que, en este último caso, la mamografía aporta información radiológica que no aportar la ecografía.

En el caso de la mujer embarazada, la única indicación de una mamografía será la sospecha de cáncer de mama. En este supuesto, la paciente debe tener claro que la dosis de radiación absorbida por el feto es muy inferior a la considerada segura en estos casos.

Resonancia magnética
En cuanto a esta prueba diagnóstica, Merino argumentó que la interpretación de las imágenes puede ser difícil, debido a la rápida absorción del contraste en la mama. Al igual de la mamografía, su uso será el estudio de extensión del cáncer de mama. La ponente aclaró, además, que el contraste que se usa en resonancia magnética es seguro en la mujer que está dando el pecho.

Citología
Una vez realizadas las pruebas de imagen, puede ser necesario realizar una citología o una biopsia para llegar al diagnóstico del nódulo  mamario. En la citología cabe la posibilidad de falsos positivos debido al estímulo hormonal que afecta a las células epiteliales. Hay que contar con un citopatólogo experto y resaltar que la prueba se ha realizado en una mujer lactante. En cuanto a las biopsias, Paula Merino señaló que la que se realiza con aguja gruesa es segura y sustitutiva de la biopsia quirúrgica.

Lesiones palpables en la lactancia
  • Galactocele: Es el nódulo benigno que se diagnostica con más frecuencia durante la lactancia. Se produce por obstrucción ductal debido a una reacción inflamatoria. La aspiración del contenido es la prueba a realizar para tener un diagnóstico definitivo.
  • Adenoma de la lactancia. Es un nódulo benigno. Normalmente son fibroadenomas o adenomas tubulares preexistentes en los que el embarazo ocasiona actividad secretora.
  • Fibroadenoma. Es el nódulo sólido, benigno, diagnosticado con más frecuencia en las mujeres jóvenes. Es hormonosensible, por lo que puede crecer durante el embarazo. Es difícil diferenciarlo del adenoma de la lactancia.
  • Mastitis. Es una complicación frecuente en el puerperio.
  • Cáncer de mama: se encuadra en el epígrafe de cáncer de mama asociado al embarazo, ya que este se define como el que aparece durante la gestación o hasta un año después. El diagnóstico suele realizarse en un estadio más evolucionado que en mujeres no embarazadas, por lo que tiene un peor pronóstico. Los principales motivos de retraso en el diagnóstico son:
    • Atribuir nódulos palpables a pesuodnódulos. 
    • Su crecimiento rápido debido a la influencia estrogénica del embarazo.
    • Rechazo al uso de la mamografía durante el embarazo.
    • Reticencia al empleo de maniobras intervencionistas, como una biopsia.
Conclusiones
  • La mayoría de las lesiones palpables en embarazo y lactancia son benignas.
  • Los cambios fisiológicos de la lactancia hacen la valoración más difícil.
  • La exploración clínica y la ecografía son obligadas ante cualquier lesión palpable.
  • La mamografía es necesaria siempre ante la sospecha de cáncer de mama.
  • El embarazo y la lactancia no deben ser motivo de retraso diagnóstico.

viernes, 20 de julio de 2012

Lactancia materna a demanda en la UCIN: ¿Utopía o Realidad?

Concha de Alba, neonatóloga e IBCLC entre otras muchas cosas, participó también como ponente en el V Simposio Internacional de Lactancia Materna de La Liga de la Leche de Euskadi. He tenido la suerte de escucharla hablar en unas cuantas ocasiones y siempre da gusto escucharla expresarse con esas naturalidad y esa pasión de todo lo que implica la introducción y difusión de un paradigma completamente diferente en las unidades de cuidados intensivos neonatales.

Hitos como la obtención del certificado IHAN en el hospital 12 de Octubre o la instauración de los cuidados NIDCAP o que este hospital cuente con una consulta de lactancia materna son pequeñas muestras de todo el trabajo que hay detrás por parte del equipo humano del que ella forma parte.

Su exposición se centró en dilucidar si la lactancia materna a demanda en las unidades de cuidados intensivos neonatales es un mito o puede convertirse en realidad. Y para ello, no hizo una exposición al uso sino que contó una historia: la de la evolución de la política de la UCIN del 12 de Octubre.

Parte I: Ser o no ser
De Alba empezó su cuento, como todos deben empezar, con el protocolario "Erasé una vez". Pero en lugar de hablar de sapos y princesas o de sastrecillos y guisantes, ella habló de un hospital. Un hospital lleno de buenos profesionales, con ganas de ofrecer calidad asistencial basada en la evidencia científica, que empezaron a preocuparse al darse cuenta de que en su maternidad había muchos niños que no lactaban.

Para debatir el problema se creó un comité, que decidió trabajar con una herramienta más eficaz que cualquier hechizo mágico: los 10 pasos de la IHAN. Y es que estaban convencidos, porque la evidencia científica así lo demostraba, de que no había ninguna otra intervención o actuación que pudieran llevar a cabo que tuviera un mayor efecto en la prevención de la enfermedad. Ni tan siquiera las vacunas. 

Pero tenían que tener cuidado de no cuadricular demasiado todas estas actuaciones, ya que la lactancia materna no es simplemente una técnica o un protocolo, sino muchísimo más: una experiencia llena de vida y amor, que se toma gota a gota y piel con piel. Es única e irrepetible y tiene impacto tanto sobre el desarrollo del bebé como sobre la vida de la madre.

Parte II: Viviendo la crisis
Érase una vez un hospital con una puerta abierta; aunque a ratitos. En la unidad al principio la puerta estaba solo medio abierta porque había todavía personas que se resistían a invitar a las madres a ir a cualquier hora, del día o de la noche. Quizá, narró Concha de Alba, el problema era que les daba verguenza que les pudieran encontrar charlando en el pasillo o echados en un sofá. Hubiera resultado vergonzoso que todos estúvieramos charlando o durmiendo, pero no era así. Y el hecho de ir asumiendo la normalidad y naturalidad de todo ello fue la clave para poder tener la puerta abierta las 24 horas del día. Todo ello, de la mano de la certificación como centro NIDCAP, adecuando los estímulos a las necesidades de los prematuros e invirtiendo en la tecnología punta para el cuidado de prematuros: los cuidados madre canguro.

La evidencia científica, esa gran hada madrina de los grandes logros hospitalarios, dictaba, además, que era beneficioso que las madres estuvieran asesoradas durante el ingreso de su bebé en la UCI por personas con experiencia, que jugaran el papel de promotoras expertas, colaboradoras, educadoras, facilitadoras, investigadora y consultoras en cuanto a políticas institucionales.

El papel de la asesora es esperar, cuidar, entender, dotar a la madre de autonomía, cuidarla con competencia gracias a la formación continuada, mantener la confidencialidad con la madre atendiendo a su situación de vulnerabilidad. Las madres no solo necesitan información, sino también gestos, caricias, apoyo en la distancia y silencio, porque todo ello contribuye a que se sientan acompañadas y queridas.

III parte: ¿Principio o fin? 
El final de la historia que relató De Alba no es un final, sino un principio: Érase una ez un hospital con una puerta abierta, no solo físicamente, sino en el corazón de muchos profesionales, para coseguir en un futuro un inicio mejor para todos los bebés que allí nacían.

Y es que el impacto de todas las acciones implantadas se ha podido costatar y medir en la mejora de los resultados de lactancia, la disminución de los costes, el aumento de la satisfacción de los padres, un posicionamiento de liderazgo de la institución en su sector y una mejora en los programas y políticas de lactancia.

Esta entrada está dedicada a Elena y a Nico, que han podido disfrutar del final feliz de esta historia como telón de fondo para el principio de la suya.

martes, 17 de julio de 2012

Neurociencia de las emociones y de la afectividad (VSILM)

La primera intervención de Nils Bergman en el V Simposio Internacional de Lactancia Materna de La Liga de la Leche de Euskadi se tituló "neurociencia de las emociones y de la afectividad" y fue, desde mi punto de vista, otro de los momentos claves de un encuentro llenos de aportaciones intersantes. Bergman comenzó su ponencia recalcando que el ADN es la estructura encargada de la síntesis de proteínas y las proteínas son la base del cerebro, pero hay un factor adicional a tener en cuenta, que es el entorno: "el entorno hace que el ADN funcione y que el cerebro se adapte". Y el entorno natural del bebé es el cuerpo de la madre.

Con esta introducción, Bergman empezó a explicar los principios de la epigenética, una disciplina que estudia la influencia de distintos factores en la expresión del ADN. Es decir, que no todo está escrito en los genes, sino que el ambiente determina la forma en la que se expresa la información codificada en los cromosomas. Un ejemplo ilustrativo de esta influencia es que si cogemos a dos hermanos gemelos y los criamos en dos entornos completamente diferentes, parecerían diferentes.

Epigenética
La importancia de la epigenética en el ámbito de la crianza y la lactancia viene dada por factores como el estrés temprano, que altera la expresión genética y tiene un gran impacto en la salud durante toda la vida del individuo. En este sentido, Bergman citó las investigaciones de Michael Meany, psiquiatra, neurólogo y neurocirujano conocido por sus investigaciones en el campo del estrés, cuidado maternal y expresión de los genes. Citando a la wikipedia, su equipo de investigación "ha descubierto la importancia de los cuidados maternales a la hora de modificar la expresión de los genes que regulan las respuestas endocrinas y de comportamiento frente al estrés, así como al desarrollo sináptico del hipocampo".

Uno de los estudios de Michael Meany, que citó Bergman, constató que las cobayas (u otro roedor, ahora no recuerdo la especie concreta) que eran madres poco cariñosas tenían bebés más enfermizos y, a su vez, se convertían en madres poco cariñosas cuando llegaban a su edad fertil. En cambio, las madres cariñosas tenían bebés más sanos y se convertían en madres cariñosas. Hasta aquí todo tal y como lo esperaríamos. Pero el equipo de investigación descubrió que si cogían a un bebé de una madre poco cariñosa y se lo daban a cuidar a una madre cariñosa, este se convertía en un bebé sano y en una madre cariñosa cuando llegaba a la edad fertil. Por el contrario, los bebés de madres cariñosas, cuando eran cuidados por las cobayas poco cariñosas, se convertían en bebés enfermizos y en madres poco cariñosas.

Así pues, el destino no es inmutable cuando hablamos del ADN, sino que, con los mismos genes, la epigenética actúa cambiando la manera en la que se expresa el ADN para garantizar la adaptación al medio.

Neurociencia
Una vez establecida la importancia del habitat o el medio ambiente para la expresión de los genes, Bergman pasó a analizar los últimos avances en neurociencia y cómo han cambiado lo que hasta ahora se conocía sobre el desarrollo del cerebro. Así, el doctor sudafricano afirmó que "las neurona que se activan juntas, se enlazan juntas".

Pero en el desarrollo cerebral no todo es contar con los mejores ácidos grasos para construir el cerebro y las neuronas. A las 20 semanas, explicó, todas las partes del cerebro humano están en su lugar y, a partir de ese momento, el desarrollo no depende de la maduración sino de la estimulación de las conexiones entre las neuronas. El cerebro es un órgano sensorial y la activación repetida de grupos de neuronas al mismo tiempo, tiende a enlazarlas y a hacer que esa conexión sea más fuerte. Cuanto más fuerte es esa conexión, cuanto más a menudo se usa, más capacidad para transmitir y almacenar información.

Todo lo que un humano, desde el nacimiento e incluso antes, experimenta se almacena en el cortex cerebral y luego, durante la fase de sueño profundo, se transmite al hipocampo y a la amígdala, donde se forma la memoria. Solo después, la información vuelve al neocortex de manera organizada. Todo eso sucede durante el sueño, pero Bergman recalcó que es la CALIDAD del sueño la que permite que el ciclo funcione; calidad que también está muy relacionada con la segregación de la hormona del crecimiento. Pero, en contra de las doctrinas de Estivill y de supernannies varias, el sueño de CALIDAD, según Bergman y la mayoría de los investigadores en neurociencia, no se obtiene durmiendo según rutinas, sino que el sueño de CALIDAD es el que se realiza en el habitat natural del bebé... No me quiero adelantar en la argumentación, pero tampoco quiero que estas afirmaciones sobre el sueño den alas a los partidarios de métodos conductistas ;-)

¿Estoy seguro?
Esto es solo un 10% de nutrición y un 90% de estimulación
sensorial que contribuye a la autoregulación del bebé,
a proporcionarle un vínculo y apego seguro
y al desarrollo óptimo de su cerebro.
Bergman recordó que las sensaciones que el bebé experimenta en el útero están relacionadas con la presión, el tacto, el movimiento, los sonidos y el olor de la madre. Todo ello le proporciona un sentimiento de seguridad y bienestar, que activa la amigdala (emociones). Cuando el cerebro se desarrolla en un entorno seguro, se disparan las interaciones sociales y se forma un apego seguro. Así que la pregunta clave para todo este desarrollo cerebral es, en palabras de Bergman, "sorprendentemente simple" y se centra en la respuesta a la pregunta que se hace constantemente el cerebro: "¿Estoy seguro?".



Después del parto, cuando el bebé nace, está perfectamente consciente y alerta. Y su cerebro tiene dos necesidades sensoriales críticas: el olor y el contacto, que son las que le garantizan que está seguro. Así que, tal y como adelantábamos antes, el bebé solo duerme seguro y su cerebro se desarrolla en todo su potencial solo cuando siente la cercanía y el contacto de su madre.

Así pues, las primeras sensaciones del bebé en el mundo son emocionales y sociales. Si el bebé se siente seguro en contacto con su madre, desarrollará un vínculo emocional y una relación de apego seguro. En cambio, la ausencia de la madre es percibida con un peligro real para la supervivencia y cuando el bebé no se siente seguro (cuando está separado de su madre) la amígdala refuerza los circuitos de evasión del lóbulo frontal. Si este refuerzo continua por otras vías, el resultado es un apego inseguro.

Lactancia materna
En todo este proceso de apego y vínculo seguro, que garantiza un óptimo desarrollo del cerebro, la lactancia materna tiene un papel fundamental. Pero no, como decíamos antes, por los ácidos grasos óptimos para la construcción de los bloques del cerebro, sino porque el acto de amamantar es un 10% nutrición y un 90% estimulación: vista, olor, sensaciones, estímulos. Todo un cúmulo de reguladores maternos ocultos que controlan la fisiología del bebé, tal y como se ha demostrado en las investigaciones de Myron Hofer.

Sin embargo, cuando el bebé y su madre están separados, desaparecen estos reguladores y el bebé está perdido, su comportamiento no es fisiológico (normal) y, por eso, ofrece una respuesta de protesta-desesperación (llanto).

Neurociencia materna
Pero el contacto piel con piel, el correcto desarrollo del bebé en su habitat (un continuum con el cuerpo de su madre), no solo es necesario para el retoño, sino también para estimular el comportamiento maternal. En este aspecto, subrayó Bergman, no hay nada nuevo bajo el sol y citó un salmo de la Biblia que afirma "yo aprendía  a confiar en el pecho de mi madre".

Cuando el bebé succiona, estimula la areola y dispara la secrección de oxitocina. Esta hormona, a la vez, dispara el sentimiento de ferocidad y protección de la madre. El contacto piel con piel y el intercambio de miradas entre la madre y el bebé, hace que esta se vuelva "doblemente feroz" en la protección de su hijo. Es una madre sin miedo.

El estímulo del bebé dispara la secrección de tres importantes hormonas: oxitocina, prolactina y colecistoquina. La primer, como hemos visto, dispara el comportamiento de protección. La prolactina garantiza la producción de leche adecuada a las necesidades del bebé (nutrición) y la colecistoquina hace que la madre se sienta segura, regulada. Así, el bebé no está indefenso sino que viene "de serie" con los mecanismos que le garantizan que su madre le cuidará, le alimentará y se sentirá satisfecha y segura durante todo el proceso.

El bebé necesita a la madre, pero la madre necesita al bebé en la misma proporcion.

Lo que de verdad importa
Bergman concluyó que cada día es más importante mirar CÓMO nacemos, ya que es uno delos momentos más importantes. La separación del bebé de su madre es percibida como estrés, el estrés altera el ADN y por tanto el comportamiento y la salud a lo largo de toda la vida del individuo.

Al nacer, y después, la necesidad biológica del bebé es la madre.

Al nacer, y después, la necesidad biológica de la madre es el bebé.

Lo único que necesitan es permanecer juntos.



Y con esto y un bizcocho me despido, que al escribirlo me he vuelto a emocionar casi tanto como al escucharlo. ¿Os he dicho ya que quiero montar un club de fans de Nils Bergman?

Dedicado con cariño a Suu, ella sabe bien por qué y a toda mi tribu de vacas, tetas y brujas con las que hemos estado de akelarre en Endor este fin de semana.

jueves, 28 de junio de 2012

Historia de La Liga de la Leche (VSILM)

El V Simposio Internacional de Lactancia Materna organizado por La Liga de la Leche Euskadi en San Sebastián, del 27 al 29 de junio, dio comienzo ayer después de una inaguración en la que, a nivel personal, destacaría la declaración del alcalde de San Sebastián que se confesó "defensor a ultranza" de la lactancia materna.

La primera mesa redonda sirvió para hacer repaso de la historia de La Liga de la Leche (LLL). Eileen Harrison, presidenta de LLL Europa, rememoró los comienzos de LLL en Estados Unidos, en la década de los cincuenta, cuando un grupo de madres que se reunía descubrió la necesidad que tenían otras muejres en su misma situación de información y apoyo para amamantar a sus hijos en una época en la que, en el mejor de los casos, solo el 25% de los bebés recibían algo de leche materna.

En aquella época nos podía mencionar la palabra "pecho" (Breast) en los medios de comunicación, por lo que las mujeres que fundaron LLL tomaron su nombre inspirándose en una virgen de culto en una capilla de Florida: Nuestra Señora de la Leche y del Buen Parto.

La idea tuvo una agran acogida y, en seguida, empezaron a recibir contactos de otras madres que querían establecer grupos similares en sus áreas de influencia. A principios de los años 70, LLL empezó a extenderse por Europa, a través de esposas de militares destinados en bases europeas o mujeres que habían vivido en USA y volvían a Europa.

Victoria Navas, monitora de LLL en Málaga, IBCLC y presidenta de LLL en Andalucía, destacó en su exposición ciertos aspectos de los orígenes de este grupo de apoyo a la lactancia de dimensión mundial, como el hecho de que en los años cincuenta, en algunos estados de EE.UU. amamantar en público era considerado una conducta obscena y, por tanto, punible (derogada por la Ley de Florida de 1993). Por otro lado, en las décadas de los sesenta y los setenta, el principal problema para promocionar la lactancia materna era que se asociaba con el "regreso a épocas pretéritas y la pérdida de derechos de las mujeres" (fíjese el lector lo modernas que parecen a la luz de estos datos las Badinters y cía.).

Para ilustrar las barreras a las que se enfrentaban las mujeres pioneras en la promoción de la lactancia materna en grupos madre a madre en aquella época, Victoria Navas expuso un ejemplo de una revista del año 1938 en la que un anuncio de Nestlé afirmaba literalmente:
"Usted espera darle el pecho, pero hay un número alarmante de mujeres hoy en día que son incapades de amamantar a sus hijos y usted puede ser una de ellas"
Un mensaje que, sin duda, ilustra los orígenes de todos los que vendrían después (promocionados desde la industria alimentaria) sobre la supuesta incapacidad para amamantar de ciertas madres.

Para Victoria Navas, las fundadoras de LLL fueron mujeres pioneras que introdujeron muy innovadores para aquella época:
  • Mujeres que ayudan a otras mujeres. 
  • Mujeres que toman decisiones basándose en información.
  • Mujeres autogestoras de su salud.
  • Se trasfiere el poder a la mujer para que ella decida acercad de su lactancia.
Además, La Liga de la Leche desarrolló una filosofía que se adelantó a su tiempo, defendiendo conceptos que hoy resultan obvios como:
  • Madre e hijo no han de separarse.
  • Participación alerta y activa de la madre en el parto para un buen comienzo con la lactancia.
  • Apoyo de la pareja durante todo el proceso.
  • Filosofía de crianza basada en el respeto y la autoestima en los niños y niñas.
Así pues, los grupos de LLL ofrecían ayuda a las madres lactantes, pero también un necesario sentimiento de normalidad para su lactancia, así como apoyo individual y grupal. Finalmente, Navas concluyó señalando que el voluntariado también es beneficioso para las asesoras de lactancia, ya que mejora su satisfacción vital y, por tanto, su felicidad.

Finalmente, la intervención de Adelina García, presidenta de LLL de Euskadi, rememoró los inicios de La Liga de la Leche en Euskadi y su implicación personal en el proyecto, de la mano de Connie Little, fundadora de LLL de Euskadi y España (1987).

Otros post interesantes

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...